Por Cristian Flores y Aldo Romero
En Tlaxcala, la presunta filtración de calendarios de supervisión a proveedores de guarderías subrogadas del IMSS Tlaxcala generó preocupación entre trabajadores del instituto. De acuerdo con fuentes internas, el aún delegado del IMSS en la entidad, Juan Carlos Corona de los Santos, habría instruido a funcionarios de la Jefatura de Prestaciones Sociales y Económicas, así como al Departamento de Guarderías, para entregar con anticipación los calendarios de inspección, los rubros a evaluar e incluso las posibles respuestas a observaciones.
Estas acciones, denunciadas por personal de base y confianza ante instancias superiores del instituto, podrían estar comprometiendo la integridad del proceso de supervisión y, por consecuencia, la seguridad de niñas y niños que asisten diariamente a estos centros.
“Las guarderías subrogadas del IMSS operan bajo contratos que implican altos estándares en materia de seguridad, infraestructura y cuidado infantil. Filtrar las evaluaciones con antelación equivale a permitir que se simulen condiciones adecuadas”, señaló una fuente consultada, que pidió el anonimato por temor a represalias.
El caso remite a episodios dolorosos del pasado, como el incendio de la guardería ABC en Hermosillo, Sonora, donde murieron 49 menores en 2009. En aquella ocasión, las investigaciones señalaron fallas estructurales y permisividad de las autoridades encargadas de la supervisión. Para muchos trabajadores del IMSS Tlaxcala, esta situación representa un riesgo que no puede volver a repetirse.
Los señalamientos han llegado, incluso, a la Dirección General del IMSS, encabezada por Zoé Robledo Aburto. Fuentes al interior del Órgano de Operación Administrativa Desconcentrado (OOAD) Tlaxcala indican que se han enviado correos electrónicos con denuncias formales desde hace varios meses, sin que hasta ahora se haya informado públicamente sobre una investigación en curso.
Por su parte, se desconoce si la Coordinación de Prestaciones Sociales o el Órgano Interno de Control han tomado medidas en torno a la presunta filtración. También se ha cuestionado si estas decisiones fueron autorizadas por la normativa del nivel central o si se trata de una acción irregular tomada de manera unilateral por el delegado y su equipo cercano.
“Nos preocupa que la función pública no actúe y que los proveedores se preparen sólo para la foto, mientras en la vida diaria los centros tienen deficiencias graves. Aquí no está en juego un contrato, está en juego la vida y bienestar de nuestras hijas e hijos”, expresó otro trabajador del instituto.
Los denunciantes exigen que se investigue a fondo el proceso de supervisión de las estancias infantiles subrogadas, se revise el papel de la jefatura responsable y se transparente cualquier relación indebida con los proveedores beneficiados. Mientras tanto, la incertidumbre crece entre los padres de familia que depositan su confianza —y a sus hijos— en manos de un sistema que, al menos en Tlaxcala, podría estar operando con irregularidades.
Mientras tanto, este 26 de junio, Juan Carlos Corona de los Santos dejará la Delegación del IMSS en Tlaxcala para asumir una nueva responsabilidad a nivel central para liderar la estrategia 2-30-100 a nivel nacional. En su lugar, llega el doctor Saúl Naváres Jiménez, quien tomará el cargo el 1 de julio como nuevo delegado, sobre quien recaerá ahora la responsabilidad de enfrentar y corregir los señalamientos de corrupción que pesan sobre la institución en la entidad.