Por Aldo Romero
El hecho de que Lorena Cuéllar Cisneros haya mandado a varias corcholatas al ruedo de la sucesión resultó contraproducente, por el acelerado desgaste y el precipitado divisionismo de la denominada Cuarta Transformación en Tlaxcala.
Es tal la urgencia por la sucesión que, al interior de la administración lorenista, ha comenzado el uso de ciertas dependencias públicas para atacar y promocionar la imagen de ciertos suspirantes a la gubernatura.
Es por eso que una de las instituciones a las que me quiero referir en esta ocasión es la Coordinación de Radio, Cine y Televisión (Coracyt).
Al parecer, la titular de la Coracyt, Angélica Domínguez Hernández, ya se decidió por su corcholata favorita, y está dispuesta a promocionarla por aire y tierra, a fin de restarle reflectores a quien es el rival a vencer en el lorenismo: Alfonso Sánchez García.
Así es, la bandera del Humanismo Mexicano ya ondea por encima de la antena de transmisiones de la radio y televisión públicas del estado.
Sin pudor y con total descaro, en la Coracyt se difunden, a raudales, las acciones del titular de la Secretaría de Educación Pública del Estado (SEPE), y otras que ni siquiera son acciones en pro de la educación, y que, obviamente, nada tienen que ver con los logros en el ramo del gobierno que encabeza Lorena Cuéllar Cisneros.
Basta con darse una vuelta por la página oficial de Facebook de la referida institución para corroborar que está atascada de publicaciones y cápsulas informativas de Homero Meneses. Lo peor es que Angélica Domínguez ya no disimula, pues publica videos y contenidos relacionados con los recorridos —con claros tintes electoreros— que el secretario de Educación realiza por los municipios. En las redes de la Coracyt se acompañan dichas publicaciones con los hashtags “Humanismo Mexicano”.
Resultó bastante interesante ver como, desde la radio y televisión públicas, se atacó con todo al gobierno municipal de Alfonso Sánchez García por su incapacidad para solucionar las inundaciones en la capital y, más recientemente, por la falta de estrategia para arreglar las calles repletas de baches.
Es tal el respaldo de Angélica Domínguez hacia Homero Meneses que, desde la Coracyt, se hará todo lo posible por descarrilar las aspiraciones del alcalde capitalino, que —repito— dentro del lorenismo, es el rival a vencer.
Ya no sé si es entretenido o indignante, a estas alturas, ver cómo los lorenistas usan las instituciones gubernamentales y el aparataje partidista para saciar intereses personales, y de paso, darse con todo entre ellos.
¿Quiénes de los lorenistas que no se han visto tan involucrados en la pugna interna podrán sacar ventaja de la división que ya cimbra la estructura del gobierno estatal?
Lo que es verdad es que, mientras eso ocurre, la senadora Ana Lilia Rivera Rivera navega cómoda por aguas tranquilas.
Paciencia, Alfonso, que a ti no te toca.
El alcalde capitalino pide paciencia a los ciudadanos por el tema de las calles repletas de baches, pero está claro que esa paciencia ya la perdió el pueblo desde hace tiempo, y se ve reflejada en las encuestas.
Al menos dos estudios demoscópicos —Consulta Mitofsky y México Elige— lo colocan entre los peor evaluados. Y ni se diga en los estudios de medición entre perfiles que aspiran a la gubernatura en 2027, pues en ninguno Alfonso destaca, e incluso, las encuestas lo colocan bastante alejado de la puntera.
Alfonso, el pueblo ya no te tiene paciencia. El mismo pueblo será el que te diga a ti: “Paciencia, Alfonso, porque a ti no te tocará gobernar al estado".
Las opiniones escritas por columnistas son independientes y no reflejan necesariamente la postura editorial de Entre Líneas Tlaxcala.
Tags:
Opinión