Lo cierto es que, más allá de los nombres y los escándalos, Morena seguirá en el poder en Tlaxcala, aunque no por resultados de gobierno, sino por un sistema político que premia el control, el clientelismo y la ausencia de la oposición
Por Cristian Flores
La senadora Ana Lilia Rivera Rivera y el alcalde capitalino Alfonso Sánchez García siguen en la pelea por la candidatura de Morena a la gubernatura de Tlaxcala en 2027. De acuerdo con el estudio publicado ayer por Demoscopia Digital, las preferencias se mantienen cerradas. Rivera Rivera se posiciona con 33.8 por ciento y Sánchez García con 31.5 por ciento.
El alcalde de Tlaxcala capital logró un repunte en septiembre al pasar de 29.5 por ciento en agosto a 31.5 por ciento, rompiendo la tendencia que lo mantuvo entre 27 y 29 puntos durante cinco meses.
Por su parte, la senadora Ana Lilia mostró un crecimiento. En abril registraba 22.6 por ciento de las preferencias; en agosto alcanzó 34.2 por ciento, superando a Sánchez García, aunque en septiembre tuvo una ligera caída de apenas 0.4 décimas.
Otra figura que comienza a llamar la atención es la secretaria de Turismo federal, Josefina Rodríguez Zamora, quien en abril tenía 8.3 por ciento y en septiembre subió a 16.4 por ciento, es decir, un avance de 8.1 puntos en cinco meses.
El estudio también incluyó a otros aspirantes en el radar de Morena. En hombres, el diputado federal del PT Alejandro Aguilar López con 12.6 por ciento; el diputado federal morenista Raymundo Vázquez Conchas con 9.7 por ciento y el alcalde de Apizaco Javier Rivera Bonilla con 5.4 por ciento. Quedaron fuera de las encuestas nacionales personajes como el secretario de Educación, Homero Meneses Hernández, y el director de Fomtlax, Carlos Augusto Pérez Hernández, quienes han buscado reflectores en redes sociales con videos y mensajes políticos con el objetivo de llamar la atención.
En el caso de mujeres, aparecen nombres polémicos como la presidenta de Chiautempan, Blanca Ángulo Meneses, con 5.6 por ciento, pese a los señalamientos por inseguridad, falta de obra pública y un daño patrimonial de más de 4 millones de pesos; la diputada local morenista Lorena Ruíz García, con 3.7 por ciento, señalada por ser esposa de “El Paletas”, detenido por sus vínculos con la delincuencia organizada y por impulsar en el Congreso local una ley para callar a la prensa y a luchadores sociales. Llama la atención la ausencia de Marcela González Castillo, dirigente estatal de Morena y esposa del alcalde capitalino, en las mediciones.
También, el estudio reflejó que el 38.2 por ciento de los tlaxcaltecas votarían por Morena, a pesar de los escándalos, la corrupción y las contradicciones de sus gobiernos estatales. Ni las mentiras del expresidente López Obrador, quien prometió que acabaría con el huachicol y los vínculos con el crimen organizado —desmentidas por investigaciones periodísticas y casos como el del senador Adán Augusto Hernández con "La Barredora"—, han frenado las preferencias.
Lo cierto es que, más allá de los nombres y los escándalos, Morena seguirá en el poder en Tlaxcala, aunque no por resultados de gobierno, sino por un sistema político que premia el control, el clientelismo y la ausencia de la oposición.