La Pluma Critica.
Por Pedro Montalvo
El caso de Saúl N expresidente de Tlalcuapan, Chiautempan, quien fue acusado de homicidio, por lo cual pasó tres años en la cárcel mientras su situación se definía, hubo una sentencia de 20 años en su contra y la familia impugnó, tras una nueva revisión del caso los jueces federales encontraron anomalías y quedó libre.
Este caso debe hacer consciencia ciudadana, pues en Tlaxcala se han presentado varios casos de linchamiento, donde los ciudadanos se les hace fácil hacer justicia por su propia mano, lo cierto es que vivimos en una sociedad donde existen leyes y en el caso de los linchamientos a veces los afectados se convierten en las víctimas como sucedió con Saul N, donde la policía detuvo a los implicados del asesinato de una persona sin permitir defenderse jurídicamente.
Según testimonios de Saúl N él no mató a la persona linchada, pero como presidente de su comunidad tuvo que asumir las con secuencias de sus paisanos quienes, si mataron al hombre y donde hubo varis personas de esta comunidad detenidas, por este lamentable hecho, pero fue el quien tuvo que estar preso por un delito que no cometió.
Al parecer este y otros casos de linchamiento en Tlaxcala a supuestos ladrones, prenden los focos rojos para que los ciudadanos no hagan justicia por mano propia y dejen que las autoridades otorguen el castigo a estas personas que cometen delitos en las comunidades, porque hay que tomar en cuenta que cualquier ciudadano que cometa linchamiento puede ir a la cárcel y enfrentar una sentencia como el que le había aplicado a Saúl N de 20 años de prisión.
Lo cierto es que ante la incapacidad de las autoridades en turno y por no aplicar la ley, permiten que ocurra casos como fue el de Tlalcuapan donde por más de tres horas que los vecinos retuvieron al supuesto ladrón quien finalmente perdió la vida ante una multitud enardecida, pero eso no debe ser motivo para hacer justicia por mano propia ya que al final tendrán que responder por sus actos.
Las opiniones escritas por columnistas son independientes y no reflejan necesariamente la postura editorial de Entre Líneas Tlaxcala.
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